El extenso camino fuera del home office. Por qué es imprescindible un nuevo matrimonio.

Las restricciones provocadas por el COVID 19 empiezan a ser más distendidas y el trabajo en casa ya  no es obligatorio. Es por esto que los directivos quieren ver a sus trabajadores en las oficinas. Pero para ellos, estar presente en la oficina  a tiempo completo no es algo que les entusiasme demasiado. Muchos reflexionan sobre porqué tengo que estar en una oficina si puedo hacer el mismo trabajo en mi casa. Parece necesario un nuevo matrimonio.

¿Para qué tipo de quehaceres necesitamos realmente qué sede?

A mediados de marzo todo ocurrió con mucha rapidez. El gran número de infectados con la unión de un montón de pautas administrativas, políticas y sociales conllevo que las organizaciones tuviesen que actuar de manera rápida y enviar a sus empleados a casa. Las alternativas de comunicación digital se crearon de la manera más rápida posible así como la cooperación que se realizó en la distancia. Esto aunque parezca mentira tuvo un funcionamiento tan fructífero, que los anhelos de volver a operar parecían ajustados.

Algunos trabajadores me comentan que bien poder abandonar el estar con los niños todo el día, olvidarme de la familia o salir de ese piso de tan pocos metros en el que vivo. Otros estaban deseando hablar con sus compañeros porque viven sólos en casa. Y otros se han puestos tan contentos de poder sentarse con su compañero a la hora de comer, ir caminando a casa por la tarde.

El trabajo en la organización debería ser la regla. 

Ahora los requisitos del COVID como bien decíamos y todos sabemos han hecho que ya con las medidas adecuadas podemos acudir a nuestro puesto de trabajo y que el trabajo de  oficina en casa se vaya aliviando. Los directivos y en varias charlas tanto virtuales con personas con las que he hablado habiendo opiniones para todos los gustos prefieren una vuelta de los trabajadores para verlos de manera más frecuente. Hay modelos como «uno a cuatro» para hacer los turnos. Es una opinión mía el trabajo en la organización debería ser la regla y en casa la excepción.  Esto me recuerda el caso de Yahoo hace un par de años la abrupta cancelación de la oficina central su directora dijo la razón por la que  los trabajadores tenían que trabajar de manera física en la organización para de esta forma trabajar con otros empleados para mejorar las ganancias de la organización. Aunque siendo realistas tampoco es que este hecho le ayudará a la organización.

No creo que nos sorprenda a nadie esto. Se lleva discutiendo tiempo y tiempo sobre esto en los círculos de RRHH y empresariales. Analizando varias encuestas observo que si el trabajo en casa como era de esperar aumenta como consecuencia de esta situación ( un total de 5 días a la semana) y antes sólo era un 4 por ciento quién lo hacía. Incluso personas que nunca habían hecho home office 30 por ciento  ahora usan esta modalidad. Las cuestiones típicas que yo he tratado en alguno de mis entradas de los últimos meses como la flexibilidad, cultura, trabajo autodeterminado, liderazgo inspirador e innovador no han cambiado o lo han hecho de forma casi marginal. En conclusión las nuevas formas de trabajo a menudo hay que usarlas de forma inevitable, pero las organizaciones culturalmente hablando no están preparadas para ello. 

 

¿Qué puede ofrecer el trabajo en un entorno real?

Ahora pienso y diréis pero Begoña te estás contradiciendo nos has hablado de tu apoyo al trabajo en remoto y pienso que los trabajadores deben volver a las fábricas. Y pensarás ¿Cuáles son los motivos por los que hago esta afirmación?¿Qué es mejor probar y hacer debido a la presencia en una oficina que desde casa?Si se incrementa el uso de la oficina en casa reduciría la necesidad de un entorno físico más costoso. La respuesta rápida quizás irónica es que el empleador puede siempre que no existan razones higiénicas ordenar que se realice la visita. Sin embargo la legitimación más básica para el trabajo en oficina me parece más complicada de resolver.

Siguiendo con el caso de Yahoo observaron que la productividad en casa disminuía y que tenían que volver a coger las riendas. Al final lo que han confirmado es que se pueda confiar poco en las personas y que éstos tienen su propia visión del mundo. La lectura positiva que observaron fue que sus empleados manejaban el tiempo que disponían mejor en casa que en la propia oficina y de manera más eficiente pero la comunidad en general podía ofrecer más cosas.

¿Y de dónde se podía sacar ese más ? De que la guardería está cerca del centro del trabajo, de la tapa que se ofrece el viernes esto sabemos que ya no sirve ni será suficiente para los empleados. Hay razones más importantes porque la identificación será una de las claves y porque no hay nada que fortalezca más el vínculo con una organización que las tareas desafiantes, la interracción humana real exitosa y un ambiente de trabajo inspirador. 

Las investigaciones sobre la vida emocional de las organizaciones lo ilustra de manera significativa. Aspectos como la pertenencia, significado, coherencia y orientación hacia los objetivos dan el significado al trabajo. Estos cuatro puntos se fortalecerán a través de la interracción personal y las experiencias reales. El volver a la oficina también ayuda a delimitar el trabajo y el riesgo que se asocia al agotamiento. 

Hay que tomar decisiones de manera consciente

Pero tampoco podemos echar por tierra que el trabajo en casa tiene sus ventajas como que permite un trabajo concentrado, autodeterminado y ahorra tiempo de desplazamientos. Siempre que los directivos, responsables de organizaciones se den a ellos mismos y a sus empleados permiso de que está forma de trabajo sea culturalmente aceptada y que el trabajo autodeterminado sea posible.

¿Que seguirá? En el futuro o no tan futuro tendremos que dar respuesta a la pregunta que hacía al principio de mi post ¿Para qué tipo de quehaceres necesitamos realmente qué sede?. Cuando nos veamos tenemos que hacer esas experiencias agradables. Quizás la falta de asistencia obligatoria y la libertad recientemente descubierta resultarán una apreciación nueva para el matrimonio  profesional. Bajo mi prisma suena muy bien pero no parece posible.